Rodilla hinchada: ¿Qué es el derrame articular y por qué ocurre?
La rodilla hinchada, también llamada derrame articular, aparece cuando se acumula líquido en exceso dentro de la articulación. Es un problema muy común que puede causar dolor, rigidez, calentamiento y dificultad para caminar.
A continuación te explico las causas más frecuentes, síntomas y lo que puedes hacer para aliviarlo.
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¿Qué causa una rodilla hinchada?
✔ Golpes o lesiones
Torceduras, caídas, esguinces o desgarros pueden causar acumulación de líquido.
✔ Artritis
Tanto la artritis por desgaste (artrosis) como la artritis inflamatoria pueden provocar inflamación y derrame.
✔ Infecciones
Cuando una bacteria entra en la articulación, esta se hincha de forma rápida y dolorosa.
✔ Exceso de actividad física
Correr, saltar o levantar peso en exceso puede irritar la articulación.
✔ Acumulación de cristales
Problemas como la gota o la artritis por cristales pueden causar dolor intenso e hinchazón.
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Síntomas que debes vigilar
- Hinchazón visible
- Dolor al mover la rodilla
- Sensación de calor
- Rigidez al estirar o doblar
- Dificultad para caminar o sostener el peso
- Enrojecimiento (en casos más severos)
Si la hinchazón es muy grande, aparece fiebre o no puedes mover la pierna, se recomienda buscar atención médica.
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Cómo aliviar una rodilla hinchada en casa
Estos consejos son generales y no sustituyen la evaluación médica.
🔹 Hielo 15-20 minutos
Reduce inflamación y dolor.
🔹 Reposo y evitar impacto
No correr, no saltar, no forzar la rodilla.
🔹 Compresión
Una venda elástica ayuda a controlar la hinchazón.
🔹 Mantener la pierna elevada
Ayuda a que el líquido drene y reduce la presión.
🔹 Antiinflamatorios
Si son seguros para ti, pueden disminuir la molestia.
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¿Cuándo acudir al médico?
- Si no mejora después de 48–72 horas
- Si hubo una lesión fuerte o escuchaste un “crack”
- Si hay fiebre
- Si la rodilla está caliente y muy dolorosa
- Si la hinchazón aparece repetidamente
El especialista puede usar pruebas como radiografías, ecografías o extraer líquido para determinar la causa exacta.
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Conclusión
La rodilla hinchada o derrame articular es una señal de que algo no está funcionando correctamente en la articulación. Puede ser desde una simple carga excesiva hasta una lesión más seria. Detectarlo a tiempo y descansar adecuadamente ayuda a prevenir daños mayores.
